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Tradición e historia

Paparajote de Murcia: el dulce típico con dos ingredientes y el principal no se come

En la región murciana encontramos una gran variedad de productos típicos que, a veces, no se conocen en el resto de España: te contamos todos los detalles

3 minutos

Vista panorámica de la ciudad de Murcia / Foto: Canva

España, por lo que respecta a la gastronomía, es tan diversa como especial. Las diferentes regiones del país tienen sus productos típicos y son un factor diferencial respecto a otras comunidades. En esta ocasión pondremos el foco en la de Murcia, donde encontramos los paparajotes: se trata de un dulce único cuyo ingrediente principal, en condiciones normales, no se come. 

Qué es un paparajote

El paparajote es un dulce típico de Murcia que, a primera vista, puede resultar algo desconcertante para quienes no lo conocen. Se trata de una hoja de limonero recubierta con una masa a base de harina, huevo, leche y azúcar, que se fríe hasta adquirir un dorado crujiente y se espolvorea generosamente con azúcar y canela. Aunque la hoja de limonero no se come, su presencia es fundamental para aportar un aroma cítrico característico y una textura única al bocado.

Su singularidad radica precisamente en este uso inesperado de las hojas de limonero, algo que podría parecer puramente decorativo, pero que en realidad define la esencia de dulce. La hoja proporciona un aroma que se transmite a la masa durante la fritura. A diferencia de muchos otros postres, la experiencia del paparajote se centra tanto en el sabor como en el ritual: una mordida crujiente seguida del delicado proceso de retirar la hoja sin llegar a comerla.

¿Por qué el paparajote es popular en Murcia?

El paparajote es un símbolo de la identidad murciana. Su popularidad se debe a su estrecha relación con la huerta murciana, famosa por su producción de limones y otros cítricos. La abundancia de limoneros en la región convirtió a las hojas de este árbol en un recurso culinario accesible, perfecto para crear un postre humilde, pero lleno de sabor.

Históricamente, los paparajotes han sido parte esencial de las fiestas populares y celebraciones locales, sobre todo durante las Fiestas de Primavera en Murcia. Su origen se remonta a las cocinas humildes de la región, donde las hojas de limonero se aprovecharon como un recurso adicional para enriquecer la dieta diaria. 

Imagen de archivo de un paparajote / Wikipedia

El dulce, además, se ha convertido en un emblema cultural que representa la conexión de Murcia con su entorno natural y su herencia agrícola. De hecho, es frecuente ver a familias murcianas preparar paparajotes juntos, transmitiendo la receta de generación en generación, siempre con un toque personal y único.

Así puedes preparar un paparajote

Aunque pueda parecer un dulce exótico, preparar paparajotes en casa es sorprendentemente sencillo. Aquí tienes una receta tradicional murciana:

Ingredientes

  • 12 hojas de limonero, bien limpias y secas
  • 250 g de harina
  • 2 huevos
  • 250 ml de leche
  • 1 cucharadita de levadura en polvo
  • 100 g de azúcar
  • 1 cucharadita de canela en polvo
  • Aceite de oliva suave para freír

Elaboración

  • Preparar la masa: en un bol grande, mezcla la harina con la levadura. En otro recipiente, bate los huevos y añade la leche poco a poco, integrando bien. Añade la mezcla de harina y levadura al recipiente de los huevos y la leche, removiendo hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
  • Rebozar las hojas de limonero: sumerge cada hoja de limonero en la masa, asegurándote de que quede completamente cubierta por ambos lados. La masa debe adherirse bien a la hoja, creando una capa uniforme.
  • Freír los paparajotes: calienta abundante aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto. Una vez caliente, fríe las hojas recubiertas de masa, de dos en dos, durante unos 2-3 minutos por cada lado, hasta que estén doradas y crujientes. Retira los paparajotes con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  • Toque final: mezcla el azúcar con la canela en un plato. Espolvorea generosamente sobre los paparajotes aún calientes para que se adhiera bien a la masa.
  • Servir: recuerda que la hoja de limonero no se come; solo es un soporte aromático. Disfruta de los paparajotes mientras aún están calientes para apreciar todo su aroma y textura.

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