Loading...

Tradición e historia

4 llagares de Asturias donde redescubrir la sidra

En Lavandera y Villaviciosa encontramos estos cuatro llagares que ofrecen visitas guiadas para que podamos conocer el proceso de elaboración de la sidra y degustarla

4 minutos

Paraje de La Espuncia en plena ría de Villaviciosa donde se ubica el llagar de Sidra El Gaitero / Foto cedida

Las pomaradas de Asturias han florecido y dado sus frutos. Pequeños caprichos ácidos, de tonalidades verdosas y amarillentas, donde no faltan variedades autóctonas como de la riega, collaína o amariega. Los llagares, esos lugares donde se fabrica la sidra, están a pleno rendimiento, obteniendo el elixir amarronado que se conoce como sidra dulce, o del diernu —por su gran contenido en azúcares— que pronto se convertirá en auténtica sidra asturiana tras la fermentación alcohólica.

Recogida de manzanas y distintas variedades de manzana / Foto: Canva y Sidra Cortina

Un ritual que se incrusta en el código genético astur y que empapa el suelo de los llagares de estas tierras cuando los curiosos visitantes se disponen a conocer más sobre la bebida estrella asturiana. Entre los llagares, los hay históricos, de nueva creación o que esconden historias de indianos, y estos cuatro que hemos visitado son buenos ejemplos de ello. Visitarlos nos asegura la inmersión en la esencia de Asturias. 

Casa Trabanco

Opciones de maridaje con sidras en Casa Trabanco / Foto cedida

Gijón cuenta con varios llagares que se han inspirado en el mundo enológico para transmitir la esencia de la sidra asturiana. Uno de los se esmera para ofrecer una buena experiencia a visitante es Casa Trabanco, toda una referencia en el mundo de los eventos —es posible realizar bodas— que no olvida su origen como llagar tradicional. 

Las visitas guiadas permiten conocer sus orígenes, el llagar que Emilio Trabanco inauguró en 1925 y que roza el centenario, y se complementan con un paseo por el pueblo de Lavandera, que continúa con la imagen bucólica de aldea asturiana a pesar de su cercanía con la capital. Sumamente interesante es recorrer su Túnel de la Sidra, una antigua instalación ferroviaria que iba a servir para adentrar el tren en las comarcas mineras asturianas y cuya puesta en marcha nunca llegó a cumplirse. // Casa Trabanco. Carretera de Lavandera, 3225. Lavandera (Gijón). Tel.: 985 136 462. Imprescindible reserva previa. Precio: 15€ con cata (menores de 16 años, gratis). 

Sidra Cortina

Visitas al llagar de Sidra Cortina / Foto cedida

La parroquia de Amandi (Villaviciosa) destaca por contar con varios puntos de interés para el viajero: la iglesia de San Juan, encaramada en lo alto del valle y que algunos consideran como la mejor expresión del románico asturiano; y las enormes plantaciones que culminan el territorio y que dejan un aroma ácido en el ambiente, roto por el zumbido de las abejas polinizando los manzanos en flor

Sidra Cortina bebe de la tradición llagarera en un lugar como Villaviciosa, epicentro de la cultura sidrera. Y aunque los toneles de madera han dado paso a los de acero inoxidable, es posible “espichar” —degustar— un culín de esta bebida que ha ganado el primer premio a “Sidra más prestosa 2021” otorgado por la asociación de chigres y restaurantes de la calle Gascona, en Oviedo. // Sidra Cortina. San Juan, 44 Amandi (Villaviciosa). Tel. 985 893 200. Imprescindible reservar con dos horas de antelación. Precio: 8€ con cata (menores de 18 años, gratis).

Sidra Castañón

Exterior del llagar de Sidra Castañón / Foto cedida

Aunque entre los toneles encontramos a Julián Castañón, responsable del llagar, su hijo Alfonso brota como savia nueva en el panorama sidrero asturiano, siendo la cuarta generación de este llagar. Nacido en la mariña maliaya en 1938, lugar de culto por sus buenas fondas y sus pomaradas que caen al mar, Sidra Castañón ha apostado por la modernización de sus instalaciones, acercándose a un concepto que bien nos puede recordar a las mejores bodegas de vino nacionales. 

No es para menos ya que sus elixires están entre los más laureados del Principado: primer puesto como Mejor Sidra Natural de Villaviciosa en 2020 —un galardón que fue sumamente emotivo para Julián— así como Mejor Sidra Natural 2021 en la XVIII Edición del concurso convocado por el Consejo Regulador de la DOP Sidra de Asturias. 

Toneles en el llagar de Sidra Castañón / Foto cedida

La visita incluye un recorrido por las modernas instalaciones sin perder la esencia del día a día en un llagar. Quienes se acerquen podrán degustar sidra fresca recién escanciada del propio tonel, introducirse en uno y saborear una de las elaboraciones más exclusivas del llagar, su Roxmut —vermú de sidra—. En otoño, se celebran jornadas de amagüestu, donde las castañas asadas se convidan con sidra dulce. Toda una tradición. // Sidra Castañón. Carretera San Miguel, 90-103 Quintueles (Villaviciosa). Tel.: 985 894 576. Imprescindible reserva previa. Precio: consultar.

Sidra El Gaitero

Exterior del llagar y bodega histórica de Sidra El Gaitero / Foto: Instagram

Fue pionera en abrir el mundo de los espumosos en el sector sidrero asturiano. La industrialización a finales del siglo XIX del Principado, la apuesta por el puerto gijonés o los indianos retornados de América fueron claves en la construcción de Sidra El Gaitero en el paraje de La Espuncia. De ahí, que su fama sea reconocida a nivel mundial, más allá de acertados eslóganes de agencia de comunicación. El Gaitero, cuya esencia sigue siendo la producción de sidra espumosa, ha diversificado su cartera de productos con turrones, dulces y conservas

Su bodega tradicional es todo un paraíso para quienes busquen sinceridad en los llagares. Aunque el paso del marketing turístico ha golpeado las instalaciones, el entorno de la ría de Villaviciosa así como la propia instalación champanera, de 1890, se abren como privilegiado balcón del patrimonio industrial asturiano. Tres plantas que son origen y cultura de uno de los llagares históricos con más personalidad de la región. // Sidra El Gaitero. La Espuncia, s/n. Villaviciosa. Tel.: 985 890 100. Imprescindible reserva previa. Precio: 5€ (entrada colección, bodega y degustación).

Etiquetas: