Este guiso marinero de calamares pertenece al patrimonio culinario de Mallorca y es una receta de pescadores recuperada por el chef Santi Taura. Toma el nombre de su origen, Cala Figuera, pedanía marinera de la vila de Santanyí, el municipio más meridional de Mallorca. Existe constancia del uso de esta cala como puerto desde hace más de 700 años, siempre con un fuerte arraigo al oficio de pescadores y a la tradición marítima mediterránea.
Lo único complicado de este plato de contrastes, reconfortante y nutritivo es limpiar el calamar, algo que en nuestra pescadería de confianza pueden solventar. Si te atreves tú, te recordamos cómo hacerlo en el primer paso. Lo mejor de los calamares estilo Cala Figuera es la unión de sabores del calamar fresco con la cebolla sofrita y, sobre todo, con el encurtido. Se puede elaborar todo el año, pero invitamos a probarlo en la temporada del calamar, de julio a septiembre. Una vez lo cocines, lo incorporarás a tus especialidades.
El chef Santi Taura es uno de los mayores baluartes de la cocina mallorquina y del panorama español. Su apuesta por la recuperación de las recetas de la isla lo convierten en un importante divulgador de la historia culinaria. Taura resucita de recetarios domésticos y populares platos que se han perdido o que se encuentran en peligro de extinción, y lo hace mediante un rigor, una destreza y una sensibilidad mayúsculas, porque respeta el origen, los ingredientes y los sabores.
Sus recetas recuperadas logran gran difusión gracias a dos canales. Por un lado, recoge la esencia de estas recetas en sus establecimientos, sobre todo en Dins, restaurante con una estrella Michelin y dos soles Repsol, en Palma. Puedes aproximarte a la experiencia y echar un vistazo a sus platos leyendo nuestra crónica. Por otro lado, divulga a través de su propio programa en la televisión balear, que es donde hemos aprendido esta receta que también se puede probar en su menú Orígenes. Aquí la presentamos de la manera más aproximada a cómo se cocina en el ámbito doméstico, adaptando los ingredientes y pasos de Taura a despensas más allá de Mallorca. En el restaurante se disfruta más pulida, con el caldo reducido y los ingredientes cortados finamente. Más o menos rústica, es una receta de diez.
Información
Tiempo TOTAL
40 minutos
Tiempo de PREPARACIÓN
10 minutos
Tiempo de COCCIÓN
30 minutos
DIFICULTAD
FACIL
COSTE
€ € €
TIPO DE PLATO
Plato único
TEMPORADA
Verano
TIPO DE DIETA
Sin gluten
TIPO DE COCINA
Mediterránea
TECNICA
Guisar
INTOLERANCIAS
No apta para veganos
Ingredientes AmpRecipeViewer.default.yields
Si en la pescadería no te han limpiado los calamares, procede. ¿Cómo se limpia un calamar? Primero, mete el dedo corazón y el índice y estira de la bolsa que une sus tentáculos con sus órganos internos para que salga entera. Ten cuidado porque contiene un saquito con la tinta, la cual no empleamos en esta receta. Una vez fuera, desecha los ojos y la boca (parte muy dura) y quédate con las cocochas y los tentáculos. Segundo, extrae la pluma y tírala. Tercero, separa las aletas. Cuarto asegúrate que el tubo queda limpio. Lava todo debajo del grifo.
Ya limpios, corta el cuerpo tubular por la mitad de arriba a abajo y en tres. Corta las aletas y desecha lo que es excesivamente duro y cartilaginoso. Deja los tentáculos enteros, pero sepáralos en al menos dos partes.
Golpea o machaca con un solo golpe media cabeza de ajos con ayuda de la hoja de un cuchilo grande o bien con el culo de un mortero. En una cazuela amplia u olla pon aceite y cuando esté caliente, echa los ajos tal cual. Una vez comiencen a perder la piel, la textura cambie ligeramente y el aroma comience a impregnar la cocina, agrega los calamares cortados.
Mientras los ajos se hacen, corta la cebolla. Desecha ambos extremos y la piel externa. Corta la cebolla por la mitad y después, de nuevo, corta las mitades en dos. Lamina en juliana.
Una vez que el calamar vaya perdiendo su agua y comience a cambiar el color, echa una cayena seca y salpimienta. Cuando el agua se haya evaporado por completo y empiece a sofreír, agrega la cebolla y poco más de aceite. Tapa la olla y mueve cada dos o tres minutos.
Una vez veas que el calamar y la cebolla se han hecho e impregnado mutuamente, sobre todo cuando la cebolla ha perdido firmeza y ya está tierna, agrega el tomate. Vuelve a tapar unos tres minutos. Mientras, puedes dar un golpe de calor al caldo de pescado en otra olla o cazo.
Primero, agrega la copa de vino blanco y mueve bien para que se unan los aromas y las texturas. Una vez haya evaporado parte del vino, echa las olivas negras sin hueso y las alcaparras encurtidas. Por último, añade el caldo de pescado, mueve todo bien y tapa. Déjalo a fuego medio unos 15-20 minutos. Pasado este tiempo, añade el perejil picado. Mueve un minuto más y deja reposar para que se asiente ya con el fuego apagado. Sirve y disfruta.
Nada mejor que terminar con una postal de Cala Figuera (Mallorca):