La tradición manda y aunque en estos días el aceite escasea, los valencianos seguirán friendo y disfrutando del dulce más típico de las Fallas: los buñuelos de calabaza o bunyols de carabassa. Durante toda la semana su elaboración perfuma cocinas, patios, escaleras y calles. Como cualquier dulce de sartén, ligero no es, pero el paladar explota con esta bomba de sabor (y calorías) que levanta el ánimo y te recompone para comenzar o seguir la fiesta.
Los otros dulces tradicionales imprescindibles de las Fallas son los churros y las porras, primos hermanos de los buñuelos de calabaza. Existen otros buñuelos, los de higos secos (figues albardaes), que siguen la misma receta pero remojando y troceando la fruta, que se preparan también algunas cocinas valencianas estos días, pero sobre todo en Castellón durante las Fiestas de la Magdalena, que este año son del 19 al 27 de marzo.
El mejor acompañante y el más tracional de los buñuelos de calabaza es el chocolate. Mojarlos en él es una delicia que sería injusto que solo los valencianos disfrutaran, así que anímate a preparar esta receta, que no es difícil, aunque sí laboriosa y requiere de casi una hora de reposo.
Una receta doméstica
Para componer nuestra receta hemos consultado a una cocinera doméstica que tiene la mano rota respecto a los buñuelos de calabaza, la valenciana Encarna Giménez de Alberic, villa de larga historia de la Ribera Alta donde se viven intensamente las Fallas. Esta cocinera acostumbra a cocinar 8 kilos de una sentada, para la familia, conocidos e incluso bares de la zona. Además, como en su familia hay celíacos, prepara una buena tanda con harina sin gluten.
Es muy común que las cocineras domésticas se unan para prepararlos y de esta manera compartir esfuerzo y pasar un buen rato. Ataviadas con sus mandiles, cuecen en grandes ollas la calabaza y mezclan la masa en palanganas XL. Verlas formar las piezas es un espectáculo y oírlas, un privilegio. Puro patrimonio culinario.
Información
-
Tiempo TOTAL
1h 15 minutos
-
Tiempo de PREPARACIÓN
60 minutos
-
Tiempo de COCCIÓN
10 minutos
-
DIFICULTAD
MEDIA
-
COSTE
€ € €
-
TIPO DE PLATO
Postres, desayunos y meriendas
-
TEMPORADA
Todo el año
-
TIPO DE DIETA
Vegana
-
TIPO DE COCINA
Tradicional
-
TÉCNICA
Freír
-
INTOLERANCIAS
No apta para diabéticos
Ingredientes
- 400 gramos de calabaza hervida
- 200 gramos de harina común
- 25 gramos de levadura de panadería
- 1 pizca de sal
- Aceite de girasol u oliva para freír
- Agua del caldo resultante al cocer la calabaza
- Azúcar
Preparación
-
Prepara el puré de calabaza
Pela y trocea la calabaza, quítale las pepitas y los filamentos. Hierve hasta que quede tierna y reserva el agua (caldo) de la olla. Deja templar y tritura con ayuda de una batidora.
-
Deslee la levadura
En un cuenco vuelca un poco del agua templada restante de cocer la calabaza, añade la levadura y deslee con una cuchara o pincel.
-
Mezcla los ingredientes
En un bol grande echa la harina, haz un volcán con un agujero en el centro y añade la levadura desleída. Mezcla bien con las manos. Añade el puré de calabaza y un poco de sal. Sigue mezclando.
-
Reposa la masa
Cuando la masa consiga homogeneidad, déjala reposar 1 hora tapada con un paño. Muy importante: ha de doblar su volumen.
-
Forma y fríe
Mete la masa en una manga pastelera y tienes dos opciones, ambas ya encima de la sartén con el aceite bien caliente: 1) a medida que sale la masa la cortas con los dedos o con una tijeras a modo de bolita. 2) o bien intentas darle forma de rosquilla. Con una espumadera las volteas y vas retirando a medida que estén doradas.
-
Escurre el exceso de aceite
A medida que los saques colócalas sobre papel absorbente de cocina. Deja que templen antes de rebozarlos en azúcar.
-
Reboza en azúcar
Coloca azúcar en un plato y reboza ligeramente los buñuelos. Sacude y listos.
Truco
- Tamiza la harina antes de dar la forma de volcán, de esta manera reduces la aparición de grumos.
Consejos
- Es importante amasar bien para evitar los grumos.
- Las manos valencianas más expertas no requieren de manga pastelera cuando elaboran en casa, lo hacen apretando un pedazo de masa con la mano y dándole forma a través del hueco del puño. Es un arte que requiere de mucha práctica.
- Si no tienes manga pastelera puedes ayudarte de dos cucharas engrasadas de aceite o lanzarte con tus propias manos, que alguna vez hay que atreverse.
- Cuando trabajas con una masa, las manos quedan pegajosas y la labor se complica. Ten siempre un bol de agua templadita para formar con agilidad cada buñuelo.
- Puedes rebajar las calorías que implica el azúcar blanquilla sustituyéndolo por un poquito de azúcar glas espolvoreado antes de servirlos.