Unos 140 trabajadores del restaurante The Bazaar, propiedad del cocinero español José Andrés en el centro de Washington, negociarán su primer convenio colectivo después que esta semana la empresa de restauración reconociera la representación sindical.
"Como empresa independiente de restaurante establecida en Washington más de tres décadas en medio de los tiempos más difíciles, nos enorgullecemos de haber creado puestos de trabajo seguros y equitativos, con dignidad para todos", señala un mensaje de la compañía en la red social X.
"Tenemos la esperanza de que al sentarnos juntos a la mesa podremos cooperar para preservar buenos trabajos que emplearán trabajadores en los años venideros", añade.
Por los derechos laborales
La aquiescencia de la empresa de José Andrés a reconocer voluntariamente una representación sindical permite ahorrarse el trámite de una elección supervisada por la Junta Nacional de Relaciones Laborales.
Según fuentes gremiales, el 70% de los empleados del restaurante, que opera en el hotel Aldorf Astoria, hasta hace poco tiempo propiedad del expresidente Donald Trump, había solicitado a la empresa de restauración de José Andrés que reconociera al sindicato.
Un comunicado de la organización sindical Unite, Here! señaló que "los trabajadores merecen los mismos derechos y el respeto que ya disfrutan los empleados del hotel Waldorf Astoria".
"Muchos de estos trabajadores, como el mismo José Andrés, son inmigrantes que trabajan duro tras un sueño de una vida mejor para ellos y sus familias", agrega la nota.
Los trabajadores buscan mantener una negociación por unos sueldos más altos, un seguro de salud más asequible y una distribución más transparente de las propinas en el restaurante que Andrés inauguró en 2023 en The Old Post Office, a dos manzanas de distancia de la Casa Blanca.
Andrés, que hace apenas unos días recibía un nuevo reconocimiento, en este caso el TRT World Citizen Lifetime Achievement Award que otorga la Corporación Turca de Radio y Televisión de Turquía (TRT), por el "liderazgo visionario del chef al establecer la innovadora World Central Kitchen", ya tenía planes en 2015 para abrir un lujoso restaurante en la Avenida Pennsylvania, pero se retiró del negocio con la organización Trump después que el entonces candidato presidencial se refiriera a los inmigrantes mexicanos como criminales.
La organización Trump demandó a la empresa de Andrés por 10 millones de dólares, lo cual derivó en una disputa legal que terminó en 2017 con una conciliación.