Los ladrones ya no se conforman sólo con las joyerías, los bancos o las obras de arte, también entienden de vinos y saben del elevado valor que pueden tener algunas botellas. En noviembre de 2022 recogíamos la noticia de que el restaurante Coque, capitaneado por los hermanos Sandoval y con dos estrellas Michelin, había sido víctima del robo de 132 botellas de vino por un valor de 200.000 euros. No eran los únicos.
El Hotel Átrio de Cáceres (Extremadura), cuyo restaurante liderado por el chef Toño Pérez, también con dos estrellas Michelin, sufrió el 28 octubre 2021 otro robo millonario: cerca de 80 botellas valoradas en 1,6 millones de euros. La lista sigue con ejemplos como el robo de cerca de cuarenta botellas de vino de Burdeos de alta gama en el restaurante DiverXO de Dabiz Muñoz en 2019, o la sustracción de siete botellas magnum (de litro y medio) del renombrado champán Dom Pérignom, con un precio individual de unos 440 euros, en la tienda especializada Vins i Licors Grau de Palafrugell (Girona).
El botín robado en Palafrugell
Eso fue en 2106 y ahora esta gran tienda ha vuelto a ser víctima de los ladrones, que entraron este pasado domingo, 9 de julio, a mediodía y se llevaron nueve botellas de vino muy valiosas, con el establecimiento lleno de gente.
Así lo recogen distintos medios y especifican cuáles han sido las referencias sustraídas: dos botellas de Romane Conti, con un valor de 29.950 y 25.659 euros respectivamente; dos vinos La Tache, de 12.699 euros cada uno; un Richebourg de 8.812 euros; un Exhezeaux del año 2018, con un valor de 7.516 euros; un Romanée Saint Vivant de 7.127 euros y, también, un Petrus de 5.702 euros y un Chateau Margaux valorado en 1.179 euros. En total, un montante de 111.343 euros.
Ladrones de vino reincidentes
Parece que los ladrones eran reincidentes y que ya habían intentado robar hace un mes este tipo de botellas, que tienen resguardadas tras una vitrina. En esa ocasión, los responsables del establecimiento pudieron intervenir, pero esta vez los ladrones fueron más rápidos. Entraron a la tienda, se dirigieron al apartado de grandes vinos y, con unas ventosas y un hierro para poder forzar la vitrina, accedieron a los vinos más valiosos. También llevaban escondidas unas bolsas donde cargaron el botín, para escapar rápidamente en un coche que los esperaba fuera de la tienda.
Los testigos pudieron coger el número de matrícula y lo han hecho llegar a los investigadores de los Mossos d'Esquadra. Durante la fuga, los ladrones también se dejaron dos ventosas y un móvil. Ahora, los Mossos están recopilando pruebas, también las imágenes de las cámaras de videovigilancia que habría captado los sospechosos a cara descubierta.
El local es una nave de grandes dimensiones que ejerce de almacén y punto de venta y que cuenta con un espacio destinado a vinos de gama alta y precios muy elevados. Precisamente, a raíz del primer intento de robo, los propietarios habían decidido reforzar sus medidas de seguridad y estaban a la espera de una alarma antirrobos.