La restauración sube sus precios un 7,5%, muy por debajo del alza de los alimentos

Los establecimientos públicos amortiguan el encarecimiento de la cesta de la compra y reflejan menos de la mitad de su incremento anual

Pizarra con menú en un bar, típico de la restauración española / Foto: Canva
Pizarra con menú en un bar, típico de la restauración española / Foto: Canva

Los precios de los restaurantes han subido 7,5% respecto al año pasado, por encima de la media del coste de la vida en el mismo periodo, pero muy por debajo de la evolución de los alimentos, según los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística.

El IPC de febrero ha cifrado en un 0,5% el aumento de los precios de estos servicios en su comparativa mensual, lo que eleva la subida en lo que va de año un 1,1%.

Se trata, en cualquier caso, de una subida por encima de la media del alza del coste de la vida general --que se elevó un 6% en el segundo mes del ejercicio--, pero aún lejos del 16,6% anual que ha marcado la cesta de la compra de alimentos y bebidas no alcohólicas.

De esos datos cabría deducir que los restauradores han amortiguado el impacto directo del encarecimiento de la comida y la bebida.

Los restaurantes, cafés y discotecas han subido un 7%

Del análisis por subclases, se desprende que en febrero los restaurantes, cafés y salas de baile aumentaron sus tarifas un 0,4%, lo que deja el incremento de sus precios en lo que va de año en un 1,1%: consumir en estos espacios de ocio es un 7% más caro que hace un año.

Son los servicios de comida rápida y para llevar los que más se han encarecido en un año, un 9,6% en concreto; en este caso, la variación mensual es del 0,7% y, en lo que va de año, ya acumulan un 1,3%.

Los comedores de colectividades han mantenido estables sus precios durante los dos primeros meses de 2023; sin embargo, sus tarifas son un 3,4% más altas que hace un año.

El clima en España y el gas en Holanda

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, considera que el incremento de precio del 16,6 % que han experimentado los alimentos y las bebidas responde a una menor producción por culpa de las condiciones climáticas.

"Los factores no están vinculados a la guerra de Ucrania sino a las condiciones climáticas (...) De ello deriva una situación de incremento de precios porque en enero hemos tenido una menor producción hortofrutícola y de legumbres al aire libre como consecuencia del frío", añadió el ministro. Estos productos, junto con los cereales y sus derivados son algunos de los que mas se han encarecido.

Además, Planas ha indicado que ha habido una disminución en la producción de frutas y hortalizas del segundo gran productor europeo detrás de España, Países Bajos, "como consecuencia de los precios del gas".