Cuenta atrás para el estreno de Dani García en Barcelona con el restaurante Leña que abrirá en el Hotel Grand Hyatt Barcelona. Una apertura prevista para este mismo año y que se suma a la larga lista de nuevos restaurantes que el chef malagueño está abriendo en diferentes ciudades del mundo y que conforman un imperio gastronómico en expansión con diferentes marcas como la citada Leña (que también abrirá próximamente en Miami), Bibo o Smoked Room, entre otras.
Un grupo del que también formaba parte La Gran Familia Mediterránea, el servicio de comida a domicilio que García puso en marcha en 2020 y que al menos desde principios de 2024 dejó de operar. Un cierre silencioso del que ya hablamos en Hule y Mantel que, no obstante, acabó en los juzgados y que pese a la escasa repercusión mediática que está teniendo podría complicar el futuro empresarial del cocinero.
Y es que, según publica Economía Digital, el administrador concursal que asumió el control de la empresa Rima Gastronómica con la que se operaba el delivery de García ha solicitado la inhabilitación del chef durante cinco años. No se refiere, lógicamente, a su trabajo como cocinero sino a impedir que figure como administrar de empresas en los próximos años lo que, sin duda, afectaría a la actual estructura de su grupo gastronómico ya que, como apunta este mismo diario económico, Dani García es el actual administrador de todos sus restaurantes.
También se solicitan 2,5 millones de euros para hacer frente al pago pendiente a diversos acreedores de la empresa quebrada. Una cifra que supone una notable reducción respecto a los 6 millones de euros de los que se hablaba inicialmente en las primeras informaciones sobre este polémico cierre y las deudas que había dejado detrás.
Insolvente desde 2022
El informe de la administradora es realmente devastador: se asegura que la compañía de delivery ya estaba en la segunda mitad de 2022 en situación de “insolvencia concursal”. Pese a ello, detalla, a principios de 2023 firmó nuevos contratos con sus proveedores a los que dejó de pagar a mediados del año pasado. A finales de 2023 La Gran Familia Mediterránea dejó de estar operativa, aunque su cierre no trascendió a los medios hasta que se abrió el concurso de acreedores.
De todos modos, todavía habrá que esperar unos meses para saber cómo acaba el caso. Tras las peticiones de la administradora, es el turno para que la empresa quebrada presente sus alegaciones y se prevé que el juicio no se producirá hasta los primeros meses del próximo año.
También hay que recordar que, pese a ser su cara más visible y el lógico reclamo gastronómico del delivery en la última etapa Dani García tenía una participación minoritaria en Rima Gastronómica tras la entrada de nuevos inversores en 2021. Es decir, cuando se empezó a gestionar la situación de insolvencia, a finales de 2022, García ya no era propietario de la empresa, lo que seguramente pueda eximirle de cierta responsabilidad en lo ocurrido después.
Cierre en París tras poco más de un año
Que de los cierres no se habla o, al menos, se habla mucho menos que de las aperturas es un viejo clásico de la prensa gastronómica. Tal vez por eso no solo apenas se ha hablado del fin de La Gran Familia Mediterránea y el juicio alrededor de sus problemas económicos, sino que tampoco ha trascendido demasiado que el único restaurante de García en París también ha echado la persiana.
Se trata del restaurante La Chambre Bleue —del que también se había anunciado una futura apertura en Ámsterdam—, ubicado en el hotel Maison Delano en el elegante y cotizado barrio del Distrito VIII. Llama la atención que el local abriera en primavera de 2023, con lo que apenas se ha mantenido operativo un año. Especializado en cocina mediterránea y con un nombre que pretender trazar lazos entre Málaga y París de la mano de la obra de Picasso, tampoco en este caso han trascendido más detalles sobre el cierre.
Esta suerte de asesoria del cocinero sí que chocaba un poco con el modelo de negocio que ha instaurado en su grupo durante los úlimos años y que se centra en operar con diferentes marcas y modelos gastronómicos y apostar muy fuerte por la expansión internacional con alguna de estas compañías propias.
El 'delivery' de los youtubers
Pero, volviendo a la Gran Familia Mediterránea nació en plena explosión del delivery durante y tras la pandemia de 2020. El formato de comida a domicilio servida no desde un restaurante sino desde las llamadas cocinas fantasma vivió una corta época de expansión en el país y, aunque todavía se mantiene, la vuelta a la normalidad y los problemas legales de algunas de estas cocinas industriales situadas en el centro de las ciudades han pasado factura a un modelo de negocio que parecía iba a imponerse en la hostelería.
Con una carta muy variada, este delivery apostó por acciones muy mediáticas, desde la creación de un bocadillo inspirado en la serie The Bear hasta colaboraciones con diversos youtubers, que diseñaron sus propios menús para el servicio. En este caso, la propuesta basada en comida rápida y no especialmente saludable y la colaboración con algunos streamers que cambiaron su residencia a Andorra para no pagar impuestos en España sí que despertó alguna crítica.
En su momento, este medio intentó insistentemente conocer también la versión de Dani García sobre el cierre de La Gran Familia Meditarránea sin conseguirlo. Casi un año después de que todo empezara, está claro que el chef ha apostado por guardar silencio y mantenerse al margen de lo que en su momento fue uno de sus negocios más conocidos.
