Buenas noticias para los apasionados de la mejor cocina de México y para los admiradores del cocinero todoterreno Roberto Ruiz, el consagrado chef que logró por primera vez que un restaurante mexicano obtuviera estrella Michelin en Europa, además de ser el único en alcanzar dos soles Repsol. MXRR, su proyecto de comida a domicilio, llega a Barcelona tras una impecable consolidación en Madrid. Ruiz ha declarado a Hule y Mantel: "Estamos súper contentos de desembarcar con nuestro delivery, que está pensado para poder organizar desde una cena romántica hasta una fiesta para todos los invitados que quieras, con margaritas, flautas, quesadillas...Un extracto de lo mejor de nuestras cocinas".
La plataforma que permitirá su disfrute en casa es Glovo (aquí el enlace) y comenzará a operar a partir de este sábado 26 de marzo con una propuesta tan amplia como suculenta. De esta manera, Ruiz se une a los restauradores de alta alcurnia que apuestan por Barcelona a través del formato delivery, como Dabiz Muñoz (GoXo) y Dani García (La Gran Familia Mediterránea).
Qué pedir en MXRR
La carta de MXRR no es precisamente barata, pero hay mucha cocina detrás, con producto de primera, técnicas pulidas y la garantía de viajar bien. Se compone de entrantes, ensaladas tacos, quesadillas, ceviches, cronchiquecas, cócteles y bebidas, salsas y postres, además de brindar la opción de menús. A destacar sus célebres flautitas de pollo de corral, su archiconocido guacamole con totopos, la ensalada de kale, boniato, kefir y jalapeño; y sus ceviches con guiño al Pacífico: vieiras; atún rojo y chiles toreados; o langostinos.
Las quesadillas se dividen entre las de tamaño estándar y las cronchiquecas, de 25 cm. En ellas no faltan cortes de carne de primera como pluma ibérica, costillar de res glaseadas con adobo de chile pasilla, pechito de res ahumado con leña de manzano y pollo braseado. Mención especial para los veggies, la de huitlacoche guisado con chile costeño y hojas de epazote, con salsa de tomatillo verde y chile jalapeño. Todas con bien de queso hasta decir basta y con opción a escoger entre tortillas de trigo o maíz.
Sus tacos se pueden pedir en cuatro, ocho o doce. Los clásicos al pastor, con cerdo ibérico adobado en chile guajillo, salsa de chile chipotle y jardín de piña; la cochinita pibil, con cerdo adobado en achiote, x´nipec de cebolla morada y frijol refrito; el machete, con base de costilla de ternera al carbón, laquedada con salsa 3 chiles y majado de hierbas frescas, el brisquet ahumado, de pecho de ternera ahumado, pico de gallo de encurtidos y salsa jalapeño; y cómo no, las carnitas, con cerdo dorado en salsa de tomatillo verde y jalapeño.
Roberto Ruiz no solo pretende enchilar aún más Barcelona, una ciudad con buenísimo nivel en su cocina mexicana, y una evolución especializada imparable, cada vez más afinada y exigente. También quiere embriagar con sus cócteles populares como sus aclamados margaritas, que sirve en formato de 1 litro o 250 ml para compartir en casa, además del preparado para la lograr una michelada casera. De momento, solo ofrece un postre: su excepcional torrija tres leches, con masa de croissant y leche de canela con salsa de guayaba.
Finalmente, quien conoce a Roberto Ruíz conoce y consume sus salsas, comercializadas desde ya hace años en España, pero que hasta ahora no eran fáciles de encontrar en tiendas físicas. No las venden en vidrio, sino en envase take away, pero el surtido es holgado y son sus genuinas bases de intenso sabor, con tomatillo verde, jalapeño, chipotle, chile tatemado (cocido a rescoldo), chile habanero...
Quién es Roberto Ruiz
Roberto Ruiz llegó hace casi dos décadas a España, tiempo en el cual ha mantenido un ritmo imparable de trabajo, proyectos y reconocimientos, entre ellos la estrella y los soles ya mencionados. Forma parte o, mejor dicho, es el rostro más visible de una generación de cocineros/as mexicanos/as que han dado un vuelco no solo al tratamiento de su culinaria aquí, también a la forma de transmitirla. Una generación que ha elevado la oferta cocina que hasta entonces, con muy pocas excepciones, quedaba relegada a fast food o a proyectos muy limitados y tópicos.
Ruiz consiguió que Punto MX, su emblemático restaurante ya cerrado, fuera reconocido en Europa. Asimismo, fundó otras embajadas como Matarraya en Marbella e incluso allende, como su cantina en Bogotá. Entre medio, además, publicó un extenso, didáctico y fundamental libro homónimo con Montagud Editores. Desde el cierre de Punto MX puso en marcha MXRR, con tres establecimientos físicos en Madrid, todos con take away y delivery; un proyecto consolidado a pesar de los obstáculos de la pandemia.
Hace un año ha estrenó Barracuda, local que ha cosechado las mejores críticas y que recoge el espíritu de Punto MX, esta vez ahondando más en la tradición del Pacífico. La noticia de su apertura en Barcelona nos ha sorprendido mientras en Hule y Mantel trabajábamos en un artículo precisamente sobre él, por lo que en breve volveremos a disfrutar de su cocina en nuestro diario, aunque sea a través de la lectura.