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La D.O. Terra Alta prevé una de las peores vendimias de los últimos años por la sequía

En general, la campaña de la vendimia en Cataluña espera recoger la mitad de uva de lo que se consideraba hasta ahora una temporada normal

EFE Agro / Redacción

3 minutos

Vendimia en Cataluña / LUIS MIGUEL AÑÓN

El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Terra Alta (Tarragona) ha iniciado la vendimia con la previsión de que la cosecha sea un 25% inferior en términos generales que la del año pasado e incluso un 50% en viñedos de secano a causa de la sequía.

Esta previsión viene dada por "la sequía extrema que sufre la comarca, con una media de sólo 255 litros entre octubre y agosto, por los 500 litros de media de los últimos años", según ha detallado en un comunicado la D.O.Terra Alta. 

Así, se prevé que esta cosecha sea una de "las más bajas de los últimos años", con una producción que no superaría los 30 millones de kilos vendimiados, frente a los 36 millones de la pasada campaña, cifra que ya fue inferior a la media de la zona.

La campaña arrancó hace un par de semanas con la cosecha de las variedades blancas más tempranas y, en los últimos días, se ha añadido la garnacha blanca, emblema de la comarca, que ya supone el 47% del total vendimiado. El Consejo Regulador ha contabilizado hasta ahora la entrada de 770.000 kilos de uva, "con un estado fitosanitario muy bueno y una calidad excelente". 

La vendimia en Cataluña

Vendimia en Cataluña / LUIS MIGUEL AÑÓN

La D.O.Terra Alta reafirma así los datos comunicados hace unos días por Unió de Pagesos, que confirmó que la sequía mermará por segundo año consecutivo la campaña de la vendimia en Cataluña, en la que se espera recoger este 2024 entre 4.000 y 5.000 kilos de uva de media por hectárea, la mitad de lo que se consideraba hasta ahora una temporada normal.

Aunque una primavera generosa en lluvias ha ayudado a mantener vivos estos cultivos, entre otros, las precipitaciones no han sido suficientes para garantizar una vendimia satisfactoria

Por demarcaciones, la vendimia estará en línea con la del año pasado en el Penedès y el Camp de Tarragona mientras que en el sur de Cataluña, en comarcas como el Priorat y la ya mencionada Terra Alta, "la situación todavía es peor", tal y como advirtió Josep Marrugat, responsable de viñedo y vinos de Unió de Pagesos, por la escasez hídrica "ya que aún ha llovido menos".

Las viñas que se encuentran bajo la influencia del pantano de Guiamets, Margalef y Riudecanyes no se han podido regar tampoco este año. Y en la Terra Alta, "quien dispone de riego, ha tenido que consumir bastante agua", lo que dispara la factura. Además, algunas zonas han sufrido también heladas y granizo, que han dañado cerca de 2.000 hectáreas.

Por su parte, las bodegas de la D.O. Empordà, que han iniciado estos días la vendimia, calculan que la producción en esta zona podría ser entre un 15% y un 20% inferior a la media de la denominación, que es de unos 60.000 hectolitros, aunque dependerá de cómo evolucione el clima las próximas semanas.

La campaña en esta zona se ha iniciado en las fechas tradicionales, en torno a mediados del mes de agosto, empezando a cosechar las variedades más tempranas, como el moscatel de grano pequeño y alguna variedad blanca y tinta, mientras que el grueso de la producción —garnachas y cariñenas— se vendimiará en septiembre.

Ayuda al sector

Mano con racimo de uvas en un viñedo / Foto: Canva

Marrugat asegura que los productores del sector harán frente a una situación "difícil" porque tendrán que recurrir a las pólizas de seguros firmadas y los siniestros por sequía tienen estipulados precios que no contemplan la subida registrada.

"Se acumulan siniestros y se pierden bonificaciones y capital asegurable", ha dicho, al tiempo que advierte que los costes de personal, del gasoil y la maquinaria y los fertilizantes no han parado de subir.

El representante de Unió de Pagesos reclama que se habilite una línea de ayuda para los viticultores que hayan producido menos de 8.000 kilos/hectárea, al igual que se hizo el año pasado, para ayudarles a hacer frente a la situación. "Las viñas están exhaustas, con muchas cepas muertas y otras dañadas y será necesario renovarlas" para "evitar que los vitucultores acaben por irse".

Unió de Pagesos ha pedido al Gobierno que flexibilice las medidas sectoriales vitivinícolas que permitan a los productores reestructurar viñas y aumentar el número de hectáreas anuales que se puedan acoger a la renovación.

Al mismo tiempo, reclama la puesta en marcha a medio plazo de medidas para luchar contra el cambio climático como obtener riego de apoyo en viña con agua regenerada para las máximas hectáreas posibles