El sindicato agrario Unió de Pagesos ha alertado de la "nefasta" campaña de fruta dulce en la Plana de Lleida debido a las pérdidas de producción provocadas por el clima y el aumento de los costes de conservación por la inflación, que aseguran no se ha traducido en un incremento del precio.
Unió de Pagesos hizo balance de la campaña de fruta dulce, mermada este año por las heladas de principio de abri, que han afectado a 32.765 hectáreas, y el granizo caído en los últimos meses, que ha causado una pérdida de producción de entre el 50 y el 90%.
Precios extremadamente bajos
Para el sindicato, se trata de una campaña "nefasta", a la que se suma un incremento en las importaciones de pera y unos costes más elevados de conservación de la fruta, lo que augura unos "precios extraordinariamente bajos" para los agricultores.
Temen también que la inflación provoque un descenso del consumo de fruta dulce, lo que, advierten, repercutirá en los precios de las liquidaciones que las centrales hacen a los agricultores. Asimismo, recuerdan que mientras el IPC de los alimentos y las bebidas no alcohólicas ha sido del 13,8% en agosto, los precios en origen de la fruta dulce se han mantenido al nivel del año pasado.
Estrategia de colaboración
Para atajar las pérdidas, Unió de Pagesos propone a las organizaciones de productores que utilicen "al máximo" las medidas que permite la normativa comunitaria, como retirar fruta del mercado para destinarla a la distribución gratuita. También reclaman a las centrales frutícolas que dejen de competir entre ellas e inicien una estrategia de colaboración para "obtener unos precios dignos" ante la competencia de otros países, especialmente en la fruta de semilla.
Para la próxima campaña, el sindicato urge a que se activen los préstamos bonificados del Institut Català de Finances, imprescindibles para hacer frente a los costes de producción, así como las ayudas destinadas al alojamiento de temporeros.