La coctelería ready to drink (lista para servir) no para de crecer, especialmente en Estados Unidos donde tiene su mayor mercado, pero también en Europa. En España han nacido algunas propuestas bien interesantes como los cócteles en lata de Libertine Blends, de los que os hablamos en nuestro podcast Vino y Mantel; o los cócteles embotellados de Ingenio, que hoy descubrimos un poco más.
Sus fundadores son un grupo de "viejóvenes" que, tal y como bromea uno de ellos, Germán Rasilla, se han animado a emprender, al margen de sus propias profesiones. Hace un año y medio se hicieron con la fórmula de un mojito ready to drink que se elaboraba de manera artesana, aunque con poco acierto empresarial, en Rubí (Barcelona).
Vieron que había futuro: "La coctelería está al alza, las bebidas listas para servir son tendencia y en España el fenómeno del tardeo potencia el consumo de bebidas que no sean tan alcohólicas como los combinados clásicos", apunta Rasilla. Compraron el negocio, lo sanearon y han ampliado fronteras desarrollando otras dos recetas: margarita y daiquiri.
Apuesta por lo artesano
Su fábrica se encuentra en Madrid, en Villanueva de la Cañada, y desde allí elaboran cócteles embotellados que destacan por su carácter artesano. "Si entrábamos en este segmento de actividad lo hacíamos por la calidad y no por el precio. Los cócteles listos para servir que encuentras en los lineales del supermercado son artificiales, nosotros hemos optado por lo contrario", recalca Rasilla.
Así, para su margarita utilizan tequila de agave azul que "traemos a granel directamente desde México, con todas las garantías" y licor triple seco procedente de una destilería artesana de Madrid que "elaboran para nosotros".
En el caso del mojito, el limón ecológico es de Murcia, la hierbabuena es de Marruecos y el azúcar moreno de caña de Costa Rica. ¿Y el ron? Es añejo y lo elaboran en Olot (Girona), en una pequeña destilería artesana comandada por un exiliado cubano que fue director técnico de las fábricas nacionales de ron de Cuba.
"No trabajamos con ninguna marca comercial, las materias primas son de máxima calidad y lo que hacemos es seguir unas fórmulas que hemos desarrollado. Mezclamos y embotellamos. No hay conservantes ni excipientes, todo es 100% natural para que mantenga la garantía de sabor y calidad", explica.
Para el desarrollo de estas recetas han contado con la ayuda de mixers profesionales y expertos en destilación, "trabajando a base de prueba y error hasta conseguir un cóctel que guste a la gran mayoría de la gente y que funcione a la hora de embotellarlo y servirlo".
Lo más difícil, reconoce el fundador, ha sido "encontrar el equilibrio entre los ingredientes, porque cambia por completo el producto en cuanto modificas la fórmula". También menciona las trabas burocráticas y administrativas y dice que "en el mundo del alcohol solo hay gigantes, es imposible pelear con los grandes".
Fácil de preparar y con baja graduación
Más allá de esas dificultades, actualmente su catálogo lo conforman tres versiones del mojito (clásico, de fresa y sin alcohol), dos versiones del margarita (clásico y de fresa) y el daiquiri. Y están trabajando en el desarrollo de dos nuevos productos: piña colada y bloody mary.
El modo de uso viene especificado en cada botella, aunque la preparación es extremadamente sencilla. Por ejemplo, en el caso del mojito, se trata de añadir hielo picado, una bebida carbonatada (soda, Sprite, etc.) y hierbabuena como decoración. "Preferimos que el gas se agregue por separado ya que así evitamos poner conservantes y excipientes a nuestro cóctel preparado".
Otro dato importante: todos sus cócteles tienen menos de 15 grados. "Apostamos por esa graduación baja, para que funcione en ese consumo de aperitivo y de tardeo".
De momento, y con solo unos meses de presencia en el mercado, explican que ya son la marca de coctelería ready to drink más vendida en Amazon en España, especialmente en mercados como Madrid, Cataluña y la cornisa cantábrica. "Es todo gracias al boca a boca", apunta Rasilla.
Sus botellas son de 75cl y están disponibles también en tiendas gourmet y en su propia tienda online (el mojito ronda los 16,90€), además de que trabajan con cerca de 200 locales de hostelería. Asimismo, se pueden degustar en su propio restaurante coctelería Ingenio, situado junto a la fábrica (Travesía de Navarra, 1, 28691, Villanueva de la Cañada, Madrid).
"Aquí es donde tenemos nuestro banco de pruebas más grande, un dos en uno". Una zona que cuenta, además, con dos universidades y muchos jóvenes internacionales, "que son los grandes impulsores de este tipo de bebidas". Una logística y una ubicación que, igual que las recetas de sus cócteles, están medidas al detalle.
