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Qué es la ashwagandha, para qué sirve y cómo tomar la raíz que "mejora la salud sexual"

Esta hierba medicinal ayurvédica, que se ha ganado el apodo de 'somnífera', reduce el estrés y refueza la memoria: estos son sus beneficios (y sus contraindicaciones)

Laia Shamirian, escritora gastronómica. Hule y Mantel

Periodista gastronómica, nutricionista y bióloga

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Cuencos con ashwagandha en raíz y en polvo / Foto: Canva
Cuencos con ashwagandha en raíz y en polvo / Foto: Canva

La ashwagandha es una hierba medicinal ayurvédica que ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y mejora la salud sexual de hombres y mujeres. Pero, ¿es aconsejable para todo el mundo? ¿Qué precauciones hay que tener en cuenta? Y, si nos decidimos por incluirla en nuestra rutina, ¿cómo debemos tomarla? Despejamos todas las dudas, a continuación.

Qué es y de dónde viene la ashwagandha

Cultivo de ashwagandha / Foto: Canva
Cultivo de ashwagandha / Foto: Canva

La ashwagandha (Withania somnifera), también conocida como ginseng indio, cereza de invierno o grosella espinosa, es una planta tradicional de la India, utilizada en la medicina ayurvédica.

Se cultiva en regiones secas de Asia y África, y es valorada por sus propiedades adaptogénicas, lo que quiere decir que, al consumirla ayuda a intensificar o mitigar procesos fisiológicos ya existentes. Los principales responsables de sus beneficios son los withanólidos.

La ashwagandha ha sido utilizada durante siglos en tratamientos para mejorar la vitalidad y la longevidad. En la medicina ayurvédica, se cree que ayuda a equilibrar el cuerpo y la mente, mejorando la resistencia física y mental.

Gran parte de estos beneficios han sido demostrados por la ciencia, pero a falta de más estudios países como Dinamarca han tomado la drástica decisión de prohibir su venta. ¿Por qué? ¿Cuáles son los beneficios y las contraindicaciones de la ashwagandha para que haya tomado esa decisión?

Beneficios y propiedades de la ashwagandha

La ashwagandha ayuda conciliar el sueño / Foto: Canva
La ashwagandha ayuda conciliar el sueño / Foto: Canva

La toma de ashwagandha en períodos menores a tres meses se asocia con una mejor salud física, mental y sexual, tanto en hombre como en mujeres. Asimismo, reduce la ansiedad y ayuda a conciliar el sueño. Sin embargo, es importante conocer las dosis recomendadas, así como las contraindicaciones para no tener que preocuparnos por sus posibles efectos secundarios.

Reduce el estrés y la ansiedad

El estrés es una respuesta de nuestro sistema fisiológico que tiene como finalidad última otorgarnos un extra de energía para superar una dificultad. Este empuje lo manifiesta a través de la liberación de cortisol. El problema es que cuando esta hormona está activa en nuestro organismo por un tiempo indeterminado, causa daños colaterales como diabetes, insomnio, ansiedad etc.

Estudios llevados a cabo con animales y humanos han demostrado que el consumo de extracto de raíz de ashwagandha disminuye los niveles de cortisol, reduciendo también la ansiedad y los daños al sistema inmunológico asociado a altos niveles de la hormona del estrés, como, por ejemplo, el deterioro de los linfocitos T.

Aunque no se conocen exactamente los mecanismos a través de los que actúa, este beneficio es el más conocido y el que le hizo ganarse el apodo de 'somnífera'.

Ayuda a prevenir la diabetes

La diabetes tipo II es una enfermedad metabólica asociada al estilo de vida, lo que incluye la dieta, actividad física y también el nivel de estrés emocional. Varios estudios han demostrado que el estrés aumenta los niveles de azúcar en sangre promoviendo la resistencia a la insulina y consecuentemente, el desarrollo de diabetes tipo II.

En este juego, la ashwagandha resulta de gran ayuda puesto que, al ayudar a reducir los niveles de estrés, ayuda a regular los niveles de azúcar y a prevenir la diabetes. En un estudio de 2015 observaron que bastaba tomar 300 mg de ashwagandha al día durante seis semanas para ver los efectos y continuar disfrutando de su potencial beneficio durante seis semanas más después de la toma.

Mejora la memoria y ayuda a prevenir el Alzheimer

Otra de las virtudes más estudiadas de las raíces de ashwagandha es su habilidad para ayudarnos a mejorar la memoria y la agilidad mental. ¿Cómo lo hace? Los estudios con animales han demostrado que su consumo evita la pérdida de dendritas y axones, lo que se traduce en que previene el deterioro de las neuronas. Esto además de mejorar el rendimiento cognitivo cuenta con un gran potencial en la investigación para la prevención del Alzheimer.

La ashwagandha mejora la salud sexual / Foto: Canva

La ashwagandha mejora la salud sexual / Foto: Canva

Mejora la salud sexual y reproductiva del hombre

Por otro lado, el extracto de la raíz de la ashwagandha puede ayudar a mejorar la calidad, el recuento y la movilidad de esperma. Su consumo también se ha asociado con un aumento de los niveles de testosterona. Ambos son factores son fundamentales para la buena salud sexual y reproductiva de los hombres.

Mejora la salud sexual y hormonal de las mujeres

No solo a los hombres. Un estudio llevado a cabo en 2022 demostró que la toma de 600 mg de raíz de ashwagandha durante ocho semanas mejoraba el deseo y la satisfacción sexual en mujeres de 18 a 50 años. A su vez, su consumo también incrementaba el estradiol y disminuía el FSH y LH en mujeres premenopáusicas lo que ayudaba a aliviar los síntomas asociados al climaterio como cansancio y sofocos.

Contraindicaciones de la ashwagandha

Cuenco con ashwagandha en polvo / Foto: Canva
Cuenco con ashwagandha en polvo / Foto: Canva

¿La ashwagandha es segura? La mayoría de los estudios tan solo han encontrado leves efectos secundarios como malestar estomacal y náuseas cuando el consumo ha sido prolongado en el tiempo. Por otro lado, el debate acerca de la seguridad del consumo de ashwagandha abierto desde que Dinamarca decidiese prohibir su comercialización en abril del 2023.

Las razones del país nórdico radican en la posible influencia de la ashwagandha sobre la función tiroides y en la fertilidad femenina, temiendo que según la cantidad pudiese promover el aborto.

Según otros autores, los datos no son contundentes como para afirmar que dichos efectos secundarios tienen lugar en toda la población y en cualquier dosis. En estos momentos, cada estado miembro de la Unión Europea puede establecer sus propios términos. La recomendación general es que embarazadas, lactantes, personas alérgicas, pacientes con problemas de próstata y/o tiroides eviten su consumo, o tan solo lo hagan bajo supervisión médica.

A quién le beneficia tomarla

Gracias a sus propiedades la ashwagandha está recomendada para personas que estén combatiendo el estrés crónico o puntual, así como insomnio y ansiedad, ya que sus efectos calmantes han sido ampliamente demostrados.

De igual manera, la ashwagandha puede ser de especial interés para personas mayores y personas en épocas de estudio que gusten de reforzar su agilidad mental y conseguir un extra de energía y concentración. Por supuesto, personas jóvenes y adultas sin patologías también pueden disfrutar de la mejora de la salud sexual y reproductiva gracias a la regulación hormonal de la ashwagandha.

Cómo y cuándo tomar ashwagandha

La ashwagandha se comercializa principalmente en cápsula o en polvo. La tradición ayurvédica usa el formato en polvo disuelto en leche tibia para potenciar el efecto calmante. También es posible añadir la cantidad en polvo que deseemos a nuestros batidos por la mañana si lo que queremos es aprovechar su efecto tonificante y potenciar la agilidad mental.

Sobre la cantidad, los estudios llevados a cabo hasta ahora indican que podemos disfrutar de sus beneficios tomando entre 300 y 600 mg diarios durante unas ocho semanas. No se recomienda superar las 12 semanas por los posibles efectos secundarios que podría acarrear.

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