Aquí la tenemos, la famosa y esperada lista de vinos de Navidad alrededor de 10€ para gustar a todos. Porque ya llegan esas desdichadas fechas en las que el consumo, la adoración a un gordo de traje rojo, a un bebé nacido hace milenios y ese acercamiento familiar sin respetar nuestro espacio personal son bienvenidos. No hablemos de las comidas de amigos, exalumnos, cenas de empresa,... un sinfín mareante de compromisos obligados. Y a muchos nos ha pasado que, en algún momento de nuestra vida, en esos compromisos, hemos sido ese personaje nuevo: el invitado.
Porque ya seáis, él/ella/elle, llega ese día en que te dicen: "Te quiero presentar a mi familia y me han dicho que vengas por fiestas". Menudo jarro de agua fría, sonríes rígidamente y asientes tras tragar un montón de saliva. Te toca llevar algo, eso es así de toda la vida, en este caso comida ya hay, así que nos damos a la bebida. Una botella es poco, dos lo justo, muchas te pueden llevar a miradas acusatorias de cierra bares. Lo mejor son cinco y he aquí el porqué.
Ramon do Casar 2021
Empezamos con Ramon do Casar, un vino que se mueve bien entre el clasicismo y modernidad. Llevas un buen blanco de albariño, godello y treixadura, de corte más bien clásico, pero sin madera. Vamos, hecho en depósito de inoxidable. Desde O Rosal, el cru del sur en Rías Baixas, nos llega este excelente blanco, con un leve paso por lías. Buena acidez, balanceado y una fruta muy agradable. Un estupendo vino que aporta un momento agradable al inicio de la mesa sin romper muchos moldes, pero con un estupendísimo sabor de boca. Precio: 10,90€ aprox.
Les Cousins L’Inconscient (Les Cousins)
Roto el hielo, sacamos la segunda botella. Para ello te traigo un tinto fetiche, un "no falla" de manual. Les Cousins L’Inconscient es un tinto chachi que sí. Este Priorat viene con su bien de varietales: merlot, syrah, garnacha tinta, cabernet sauvignon y cariñena. Vamos, lo que viene siendo la invasión francesa y lo que nos quedó. Sus doce meses de madera redondean este conjunto que, al ser un vino que te saca de la zona de confort, sorprenderá y agradará a partes iguales. Precio: 10,50 € aprox.
Guerinda Casalasierra (Bodegas Máximo Abete)
Un buen intermezzo te lo puedes pegar con un rosadito. Es sabido que son mi debilidad, y ya puestos en faena, nos marcamos un alivio in the mouth. Mientras el plato fuerte se acaba de cocinar del todo, esperamos en la mesa con buena copa en la mano. Esto se lo dejamos a la gente de Bodegas Máximo Abete con su Guerinda Casalasierra. Un rosado navarro de esos que son frescura pura, un himno a la fruta roja para beber a gogó. Una chuche irreverente a base de buen zumo de garnacha tinta. ¡Punto asegurado para el equipo invitado! Precio: 6,50 € aprox.
Torelló Brut reserva 2017 (Torelló)
Y cerramos la parte de la comida con un espumoso que dejará un buen sabor de boca. Torelló Brut reserva 2017, esto sublima el concepto de las tres B’s (bueno, bonito y barato). Cuarenta y ocho meses de rima para este coupage de xarel·lo, macabeu, parellada y chardonnay nacido en el corazón de Corpinnat. Toda la tradición de los espumosos catalanes de larga crianza, en un vino de corte elegante, sobrio y voluminoso. Con esa burbuja tan integrada en botella, que solo la notaréis cuando cree esos pequeños fuegos de artificio en boca. Precio: 12,50 € aprox.
Moscatel de La Marina (Enrique Mendoza)
Como buen lector nuestro, seguro que ya les has dicho que el espumoso es el mejor vino para la comida. Eso del espumoso para el postre es cosa del pasado, nosotros somos gente moderna y utilizamos los vinos adecuados en el momento ídem. Claro, para el postre un vino dulce, pero no cualquier cosa, uno que los va a dejar culo torcido. Acostumbrados a los típicos vinos dulces moscatel encabezados del país, Moscatel de La Marina de Enrique Mendoza, es un soplo de aire fresco. Moscatel de Alejandría en la Marina Baixa (Alicante), donde es más antigua su plantación que la arena de la playa. Vino fresco, muy floral, con esa entrada dulce aromática típica del varietal, pero con una acidez que aliviará la boca de turrones, polvorones o roscones varios, además de hacer un guiño a la tercera edad, que de moscatel sabe letanía pero ya nadie les pone tan dulce manjar. Precio: 8,50 aprox.