La gastronomía de La Palma mantiene similitudes con el resto de Canarias en productos y elaboraciones (llámense mojos, vinos, quesos, gofio o repostería tradicional), sin embargo sus singularidades y su calidad revelan una riqueza particular. En este listado reivindicamos que, además del plátano, existen alimentos y vinos excelentes para saborear intensamente la Isla Bonita o para descubrir y apoyar su artesanía desde cualquier punto de España.
Queso palmero
La producción está adscrita a la DO La Palma y suele consumirse frescos y tiernos, algunos con un toque ahumado muy agradable. La particularidad radica en que están elaborados con leche de cabra autóctona. En Hule y Mantel hemos radiografiado el estado de sus productores y de su artesanía tras el volcán.
Chicharrones con gofio
En La Palma, los torreznos se rebozan en gofio, el alimento nativo de cereales molidos y tostados que forma parte de la dieta canaria. Son muy apreciados, por ejemplo, los del municipio de El Paso. Algunas empresas artesanales los comercializan y distribuyen, como La Montaña y Mayoyi, marca cuyos chicharrones con gofio son aptos para celíacos.
Vino de Tea
La producción de este vino está alcanzado un gran reconocimiento gracias a la apuesta de algunos/as bodegueros/as que, con la ayuda de investigadores especializados del Ipna-CSIC, lo han recuperado. Este vino se produce en Puntagorda, Garafía y Tijarafe con uvas autóctonas tintas y blancas como negramoll y albillo, y descansa en barricas de madera centenaria de tea, es decir, de los pinus Canariensis. De ahí sus asombrosos matices resinosos y mentolados.
Vinos de malvasía aromática
De una viticultura ciertamente heroica, las elaboraciones palmeras con uvas autóctonas gozan de gran reconocimiento y esta variedad, al margen de otras prefiloxéricas como la listán, albillo o marmajuelo, otorga a las referencias vinícolas de la isla unas características organolépticas que las hacen únicas.
Mojo rojo
La preparación con más fama de Canarias tiene en La Palma su más relevante representación, en gran parte debido a que entre los ingredientes (principalmente aceite de oliva, vinagre, comino, ajo, sal) encontraremos las insustituibles pimientas palmeras, popularmente conocidas como de la “p… de la madre”.
Pescados atlánticos
Enseguida viene a la mente la vieja (pez loro) como uno de los emblemas gastronómicos. Si bien se puede reconocer su tirón junto a las papas arrugadas y el mojo, muchas son las alternativas para disfrutar de un abanico marino que va desde los túnidos (como el patudo o atún rojo) o los ejemplares de costa (sargos, cabrillas…). De paso, no se puede renunciar de ninguna forma a una buena sartenada de lapas con mojo verde.
Raza vacuna autóctona
En cuanto a los amantes de la carne, deben tener en cuenta que las cabezas cuentan con un certificado de calidad que responde a la garantía de este producto cárnico diferenciado que, aunque no con gran volumen, goza de gran prestigio en la restauración de la isla.
Boniato y papas
Si bien el resto de las islas se denomina batata, el boniato en La Palma es otro de esos iconos imprescindibles al igual que las papas, de una calidad extraordinaria. El boniato suele acompañar a platos de pescado y a recetas antiguas como el escacho. Con él también se confecciona el relleno de la trucha, una empanadilla dulce de las fiestas navideñas.
Ñame
El mejor acompañamiento para el queso palmero. Es un tubérculo que se cultiva principalmente en el municipio de San Andrés y Sauces, con innumerables propiedades beneficiosas para la salud y que también sirve para cocinar muy ricos y sustanciosos potajes.
Sal marina
La recuperación de este elemento esencial tuvo en la zona de Fuencaliente, en el sur de la isla, uno de sus valedores. Nada como sazonar con este aderezo natural que en forma de sal virgen marina o flor de sal y que contribuye a sostener una actividad ancestral y un paisaje realmente especial. La visita a las salinas de Teneguía es obligatoria.
Frutas exóticas y pitaya
La Palma se ha revelado como un magnífico enclave para el cultivo de variedades actualmente muy solicitadas (aguacates, mangos, papaya,…) y, entre estas, la pitaya o fruta del dragón ha ganado adeptos por sus propiedades saludables y su vistoso y delicado juego en elaboraciones reposteras como helados, jaleas e incluso licores.
Almendra
En La Palma (como también ocurre con las setas), el fruto seco es referencia fundamental en la alimentación. Existe una amplísima diversidad de almendras (incluso se organizan catas) y en la repostería palmera sobran los ejemplos de su uso básico.
Como muestra los almendrados, solicitadísimos sobre todo en bares de carretera de Fuencaliente y que endulzan a visitantes y lugareños con una calidad constatada. Otro postre a modo de bizcochón y para no perder de vista, muy dulce –mucho–, es el bienmesabe (elaborado con huevo, almendras ralladas, miel palmera y limón rallado e ideal para acompañar con helados). La rapadura, con forma de cono, está elaborada con gofio, miel almendra y limón.
Príncipe Alberto
Una deliciosa ‘mousse’ de chocolate con almendras y avellanas que únicamente encontrarás en la isla y que tiene su origen en una visita del Príncipe Alberto a la isla que acabó derivando en la creación de una tarta en su honor por parte de Matilde Arroyo, una reputada repostera.
Ron y ron miel
El destilado cobra en la Isla Bonita un significado carácter y es que la historia de intercambios entre Cuba y Venezuela, debido a la emigración, dejaron sus huellas en forma de un producto de gran calidad. Como en toda Canarias, y basada la receta en mieles de sabores exclusivos, se confecciona un magnífico ron miel que, como licor, gusta mucho y da juego para ‘chupitos’ o la copa después de las comidas.
Puro palmero
De la referida corriente histórica de la emigración, en la zona de Las Breñas se instalaron una serie de elaboradores de productos del tabaco que reciben encargos de todo el planeta y es que estos puros compiten con las procedencias más reconocidas para los aficionados a la culminación de la experiencia gastronómica que, seguro, acompañará con buen ron palmero.
Algunos de estos productos se pueden conseguir envasados en colmados, tiendas delicatessen y grandes superficies de España. Y aunque en algunos casos se pueden obtener online, lo mejor para disfrutar del sabor intenso de estas exquisiteces es probarlo in situ, en los pueblos y entornos naturales y paisajísticos de La Palma.