8 de marzo, el Día de la Mujer. Repito, Día de la Mujer. Así que hoy no escribo yo y escriben ellas, mujeres a las que respeto, admiro e incluso me enorgullezco de ser parte de sus amigos, ellas lo saben. Así que toca callar y que hablen ellas. Vamos a por la mejor lista de recomendaciones de vinos que vais a leer jamás, por que es un honor y un orgullo enorme dar paso a estas increíbles mujeres, profesionales del vino, enólogas, empresarias, cocineras y periodistas especializadas que saben muy bien lo que beben y con lo que brindan, en este día, pero también en cualquier otro momento del año.
La Barajuela Cortado 2017 (Bodegas Luis Pérez)
Carmen Martínez de Artola, periodista. Desde las sombras gozo de su escritura, dicharachera, rica en palabras, juega con ella como si de una cantautora se tratase y hace de ella estilo propio y único.
Su recomendación: Carmen ha elegido este vino de Jerez "porque somos muy fans de la zona en general y de este productor y vino en particular", dice. Y añade: "Es un vino de uva palomino procedente de la Viña El Corregidor, del muy mítico pago de Carrascal, elaborado como se hacían los palos antiguamente. Me encanta porque cuenta historias que atrapan. Porque es potencia y elegancia. Emociones que te llegan muy adentro y que bebería cada día".
En Moviment 1 - Garnatxa Blanca 2020 (Bárbara Forés)
Pili Sanmartín, enóloga. A Pili la conocí casi a la vez que a su madre, en un entrevista que le hice hace tiempo. Por aquel entonces no tenía interés en la viña, o al menos lo disimulaba muy bien. Aún me acuerdo de que le pregunte acerca de si quería ser el relevo generacional de la bodega, me miró tranquilamente y me dijo en pocas palabras que aún no.
Dice Pilar que "elaborar vinos brisados no es más que tejer hilos para conectar con nuestras generaciones pasadas, quienes elaboraban siempre, siempre las garnachas blancas brisadas: maceradas con sus propias pieles. Me fascinan los vinos blancos con esta conexión directa con la tradición, con el paisaje, con las cepas viejas que despuntan al amanecer, que dignifican nuestros pueblos y apuestan por seguir adelante, por fijar los pies en la tierra, con esta mirada hacia adelante, pero sin perder de vista todo lo que nos precedió. Y el aprendizaje que todo esto supone, el crecimiento personal, el de las manos que cuidan de estas cepas viejas, casi centenarias, que nos regalan una vendimia tras otra, un puñado pequeño de racimos dorados, que son miel en mis manos, ese pequeño gran tesoro que acabará siendo vino en unos meses, y que disfrutaremos tras el horizonte anaranjado de la puesta de sol. Este tipo de vinos no solo contienen uva fermentada, sino que rezuman antropología, historia, patrimonio... la dignidad de las comunidades campesinas, la luz del rural, a veces más tenue y gris, a veces brillante".
Su recomendación: "En Moviment 1- Garnatxa 2020, de aquel año en que el mundo se desmoronó, aquel final de primavera lluvioso, verde, verdísimo... Donde descubrí por primera vez el mildiu, en silencio, manteniendo las distancias e intentando no caerme ante la barbarie del mundo y ese maldito hongo. Pieles infusionadas, hierbas de margen, albaricoques, carnosidad... La expresión de agradecimiento de las manos que cuidan el viñedo y aquella sensación que deja huella en el cuerpo después de un abrazo durante un día crudo de invierno", apunta sobre su recomendación.
La Dula Garnachas de Altura 2021 (Sierra de Toloño)
Yolanda Ortiz de Arri, periodista. Es una de las dos caras del portal Spanish Wine Lover, la otra es Amaya Cervera. Yolanda es una persona con un conocimiento enorme acerca del vino patrio, con una lectura didáctica, entretenida y clara sus artículos son de una necesidad imperiosa.
"Siempre es difícil elegir un único vino para celebraciones, listas o fechas especiales, pero en mi caso, Sandra Bravo es un nombre recurrente. La creadora de Sierra de Toloño (DOCa Rioja) siempre está en mi top ten. Y lo está por la calidad de sus vinos, puros y profundos, pero sobre todo por su honestidad, humildad, discreción y dignidad. Sandra es, fundamentalmente, una buena persona que hace buenos vinos. Toda su gama es digna de conocerse más y mejor. Sus vinos de entrada, Sierra de Toloño blanco y tinto, ofrecen pureza de paisaje y terruño riojano, pero donde el talento de Sandra brilla con fuerza es en sus garnachas", cuenta la periodista.
Su recomendación: "La Dula Garnachas de Altura 2021 se elabora con varias parcelas de viñas viejas en Rivas de Tereso (650m de altitud) en suelos de arcilla blanca de origen calcáreo. Para hacer este vino, Sandra vendimia la uva en el momento preciso, fermenta la uva despalillada en tinos de 1.200 litros y después redondea la crianza en tinajas, un recipiente poco común en Rioja pero que ella utiliza desde que inició su proyecto en Villabuena de Álava en 2012. Mineral, etéreo y con bonitas notas florales en nariz, es uno de esos vinos que se acaban sin que te des cuenta: pura finura, frescura y disfrute. Un vino que expresa mucho sin hablar alto".
Gran Reserva Brut Nature 2015 (Maria Rigol Ordi)
Anaïs Manobens, enóloga. Anaïs es el corazón de la bodega Maria Rigol Ordi. Con su sempiterna sonrisa, es una mujer de armas tomar. Pocos recuperan la tradición de su familia, hacer espumosos en este caso, le da el nombre de la mujer que hizo tanto por ella y encima lo sitúa en la cima de los espumosos nacionales.
Su recomendación: "¿Un vino que me emocione? Pienso que todos los vinos tienen la intención de emocionar en tanto que transmiten las emociones líquidas de las personas que los elaboran. Emociones que, inevitablemente, nos conmoverán al consumirlo de distinto modo a unos y a otros en función de nuestra propia experiencia. En numerosas ocasiones me han preguntado cuál es mi cava favorito de la bodega. Yo siempre les respondo que con los vinos sucede igual que con los hijos, no hay uno de favorito, porque a cada uno lo queremos por lo que es. Así que, cada momento tiene un vino y, para esta ocasión, elegiría una copa de Maria Rigol Ordi Gran Reserva Brut Nature 2015, un cava ecológico de coupage tradicional con más de 70 meses de crianza".
La Catalina 2021 (Celler Vall Llach)
Ruth Troyano, periodista. A Ruth la conozco de hace tiempo, aunque es de Reus reside en Barcelona desde hace bastante. Es aquí donde solemos coincidir, tanto por la calle como en saraos. Su escritura destila amor por el vino, concretamente por el de Cataluña. Apasionada como pocos, conoce cada bodega y detalles más íntimos de muchos de los elaboradores, que trata en sus textos con mimo y cariño.
Su recomendación: "La Catalina 2021 es un vino honesto, sincero, expresivo y con un fondo social y humano enormes. Una garnacha tinta fermentada en ánfora y criada en depósitos de inox y barricas de roble. Un vino que habla del Priorat más viejo y sabio con una mirada renovada. Un viaje líquido por la fluidez y la delicadeza. Un vino equilibrado, goloso y austero. Una manera más actual de interpretar las cepas de garnacha. Es uno de los tres vinos con nombre de mujer del proyecto más personal del enólogo Albert Costa (Clos l’Asentiu /Vall Llach Celler). Con ellas rinde homenaje a la gente mayor de Porrera y especialmente a las mujeres que continuaron cuidando el viñedo cuando muchos otros desertaban. Dos euros de la venta de cada botella se destinan a financiar proyectos para la gente mayor del pueblo".
Marta de Baltà (Parés Baltà)
Marta Casas, enóloga. Marta es una de las dos caras enológicas en la bodega Parés Baltà. La otra es su cuñada, Maria Elena Jiménez. Marta es una persona amable, amigable y una profesional como la copa de un pino muy viejo e inmenso. Porque tiene talento a raudales y lo demuestra con esa inquietud y conocimientos que con cada paso va dando año tras año.
Casas nos cuenta que "Marta de Baltà nació de la pasión que pone la familia Cusiné haciendo vinos con alma. La primera añada fue en 1999 y salía al mercado justo en 2001. Ese año es en el que decido estudiar enología, tras acabar la licenciatura de Farmacia mientras trabajaba los fines de semana en una farmacia del pueblo donde veraneaba de pequeña. Todo un cúmulo de anécdotas que me traen buenos recuerdos. En 2002 decidimos casarnos Josep y yo, y precisamente en 2001, cuando salió el vino, me preguntó que qué me parecía que un vino estuviera dedicado a mí. Vamos, toda una declaración de intenciones".
Su recomendación: "Es un syrah que esta plantado en Sant Martí Sarroca. Era uno de los primeros viñedos de syrah plantados en el Penedés, el abuelo de Josep era un visionario y ahora ese viñedo tiene 45 años. Es pequeñito y le llamamos "Syrah del Triángulo", por la forma del racimo. Lo cogemos en cajas y despalillado fermenta en barricas abiertas de 400 litros. Ahí hace la fermentación alcohólica y maloláctica, para después pasar en las mismas barricas un total de 13 meses. Es una producción pequeña, unas 2.000 botellas aproximadamente. Vino intenso en aromas, elegante, muy suave en boca, perfumado y largo. Un tesoro del que estoy muy orgullosa".
Vino rancio de Vila-rodona
Maria Nicolau, cocinera. Mi folclórica favorita, porque es igual de estrella que mi queridísima Jurado. A Maria la conocí un extraño día de reunión de bloggers, en el barrio de Sants. Desde entonces, y muy a su pesar, he entrado en su circulo de amigos. Es una persona con un conocimiento vastísimo acerca de la cocina, con un despliegue eléctrico en los fogones y su impacto cuando habla tiene la contundencia de una nube piro plástica.
Su recomendación: "Escojo el vino rancio de Vila-rodona (Alt Camp) porque es patrimonio, territorio, historia de Cataluña y oficio ejecutado con rigor. Porque es apostar por un vino que nos lleva a recuperar en la sobremesa un vasito de “vino bueno”. Ya que no podemos volver a tener la “solera del abuelo” en el restaurante. Cooperativas como ésta y estos vinos, accesibles y bien hechos, nos traen a la vida cotidiana los vinos rancios. Y porque en la boca es como comer un puñado de avellanas bien tostadas: cálido, estructurado, con algún recuerdo de dulce que marcha al momento, quedando la rotundidad redonda del fruto seco, la madera tostada y el amargor de su piel".
Toros de Guisando Cabernet Sauvignon (Bodega Fuentegalana)
Cristina Carrillo, enóloga. Cristina es de esas personas que cuando la veo me alegra el día. Pero para ser rigurosos, es el relevo junto a sus hermanos de la familiar Bodega Fuentegalana, que hace unos vinos fetén de todo tipo de color. De ahí, parte culpable es Cristina, tanto en el estilo como en los namings de locura. Reflejo de su persona, divertida y, a la vez, estupendamente profesional.
Su recomendación: "Hay miles de vinos, pero me quedo con uno de casa, un vino que no sigue los cánones actuales de variedades locales, el Toros de Guisando Cabernet Sauvignon, perfecto para celebrar el Día de la Mujer y brindar por todas".
Dos Cortados VOS (William & Humbert)
Rosa Molinero, periodista. Amiga, confidente y compañera de chaladuras varias. Pese a su juventud es una persona con un conocimiento enorme, curiosa como pocos. Indaga más allá de lo que quiere contar para traer relatos precisos, inteligentes y llenos de historia y vida.
Su recomendación: "Elijo el Dos Cortados VOS de William & Humbert, donde brilla la avellana, la sal y el caramelo, además del talento de la enóloga incomparable que lo ha hecho posible: Paola Medina. Le agradezco a ella la destreza de esta saca y a habérmelo enseñado a Juan Pérez, sumiller y jefe de sala de Tohqa, por donde pasé con mucho gusto a celebrar mi 30º cumpleaños y en ocasión de Vinoble 2022. La extensa y prodigiosa historia de los vinos de Jerez revive hoy en nuestros paladares gracias a profesionales como ellos. Complejo y con personalidad, con un amplio abanico aromático y numerosos matices. Una copa de vinosidad, cálida y cremosa, que ha superado el reto de mantener la acidez y el frescor. Beberemos la profundidad del tiempo que nos transportará a quiénes éramos y nos recordará todo lo que hemos vivido desde entonces".
Serral del Vell (Bodega Recaredo)
Macarena Muñoz, sumiller y embajadora de Bodega Recaredo. Macarena es una crack, una persona con un ímpetu imparable. Hace años cuando la conocí tenía entre ceja y ceja abandonar su antiguo empleo, labrarse un futuro en el mundo del vino y vaya si lo ha conseguido, en tiempo récord diría yo.
Su recomendación: "Uno de los vinos más especiales para mí es Serral del Vell de Recaredo. Cargado de fuerza y de potencia. Un equilibrio ideal entre su larga crianza, su carácter austero y la transparencia de un Brut Nature. Su frescor y largo recorrido en botella, su burbuja perfectamente integrada lo convierte en uno de mis favoritos. La potencia y estructura de la xarelo, la finura de la macabeo… Equilibrio total. Es un corpinnat de finca, arraigado en pleno corazón del Penedés".
"Las viñas del Serral del Vell fueron las primeras que descubrí al visitar Recaredo. Una vez la has pisado, no puedes olvidar esa imagen evocadora, con la imponente montaña de Montserrat al fondo, los bosques que la rodean, llenos de vida, que son testigos del paso del tiempo de sus viñedos de xarelo y macabeo. Cada vez que abro una de estas botellas, me transporta de nuevo al lugar. El hinojo, el romero, la lavanda… Todas las hierbas aromáticas que rodean el paisaje están plasmadas en el vino como una crónica fiel del territorio. Esta finca, con suelos de nódulos calcáreos y piedras de carbonatos cálcicos, le aportan un carácter muy particular a este corpinnat de viticultura ecológica y biodinámica; una personalidad que no renuncia al equilibro entre la expresión mediterránea de sus uvas y la sutileza de una larga y paciente crianza sobre lías".
"La añada actual es la 2017, una añada para no olvidar. Su segunda fermentación ha sido provocada con mosto, cosa que aún nos arraiga más al territorio. Es un vino que en este momento lo disfruto muchísimo, pero siempre guardo alguna botella para abrirla dentro de unos años y que me sorprenda la complejidad que adquiere. Distinguido, selecto, elegante… La fuerza de los años, el carácter de su crianza, la energía de sus viñas, la solidez de una manera de trabajar, la resistencia del paso de los años… Todo esto es lo que hace que, para mí, sea un vino memorable y emocionante. ¡Larga vida!".
Amontillado Convento Selección 1952 (Toro Albalá)
Cristina Osuna, enóloga. Cristina es pasión pura por los oxidativos, quizás por eso me caiga tan bien. Es la mano que dirige actualmente la bodega Toro Albalá, causante del nuevo rumbo que toman sus vinos y de que mi mirada vuelva a mirarlos. Hablar con ella es un placer, destila conocimiento y fluidez en él, cosa que agradece servidor porque hace fácil el aprendizaje de tan complejos vinos.
Su recomendación: "Me encantan los amontillados, en parte soy enóloga por culpa de ellos. Son vinos de gran complejidad, a la vez que elegantes, persistentes y que nunca te dejan indiferente. El amontillado Marques de Poley 1952, es todo eso y más. Es fiel reflejo del paso del tiempo y de la zona de donde proviene, Montilla - Moriles. Es un vino, que necesita su tiempo para expresar todo lo que encierra, aromas que van desde las hojas de tabaco hasta la piel de naranja, de gran sapidez, con una acidez muy marcada, pero perfectamente equilibrada con la salinidad. Un vino que me enamoró cuando lo probé por primera vez, y aún hoy cada vez que tengo la ocasión de beberlo descubro algún nuevo matiz".
Fumissola (Celler Descregut)
Núria Avellaneda, empresaria. Núria es la dueña de la tienda Di-Ví Muntaner, en el Eixample barcelonés. Una de mis mejores amigas, con la que comparto pasión por los espumosos, y con la que irse de jarana es siempre una aventura. Es una persona muy echada para adelante, sin pelos en la lengua y con las cosas claras, capaz de aguantar al pie del cañón una tienda de vinos durante 15 años. Y eso, es lo que valoro por encima de todo, hay que tener una mente muy fuerte para llegar donde ella ha llegado y seguir queriendo más.
Su recomendación: "Recomiedo Fumissola, el espumoso nacido en Corpinnat del Celler Descregut, en Viloví del Penedés. Bodega que regentan Arantxa de Cara y Marc Milà, donde llevan tiempo haciendo vinos y espumosos en pequeñas cantidades. Los espumosos son mi debilidad y este es su nuevo proyecto, un blanc de noirs, cupage de sumoll y xarel·lo vermell. Variedades recuperadas autóctonas. Con 36 meses de rima, en boca se hace largo, untuoso y persistente".
