Los buffets libres se volvieron especialmente populares a finales de los años 90, especialmente aquellos relacionados con las carnes a la brasa, los mariscos e incluso opciones vegetarianas. Sin embargo, la irrupción del mercado asiático ha echado por tierra muchos de estos proyectos: sobre todo por la consolidación de la comida japonesa y, más en concreto, el sushi y los woks.
En Cataluña, la diversidad de opciones en cuanto a buffets libres es casi inagotable. Culturalmente, los buffets libres siempre se han asociado a una opción más económica y, por ende, también de menor calidad en cuanto a la presentación, el tipo de cocina y los productos en sí mismos. Aunque lo cierto es que existen muchos restaurantes que ofrecen la mejor opción posible del mercado. ¿Y cómo lo podemos saber? Pues por el nombramiento de algunos galardones o menciones que los catapultan en lo más alto del ranking.
En esta ocasión, te traemos el único restaurante de buffet libre de Cataluña que está distinguido con un Solete Repsol. El local se sitúa en la comarca de Tarragona y sus precios no superan, en ningún caso, los 25 euros, lo que es accesible para cualquier bolsillo. Te contamos todos los detalles para que no te pierdas nada.
Este es el único buffet libre catalán con Solete Repsol
A menos de 30 minutos de Tarragona, hay un establecimiento de carretera que ha logrado un lugar en esta renombrada guía gastronómica. Su nombre no es muy original y va directo al grano: buffet d’Altafulla. Así, el cliente sabe dónde está y qué puede encontrar. Lo mejor es que ofrece mucho más de lo que uno espera. Para empezar, es un lugar con historia. El restaurante se presenta como el primer buffet libre de toda Cataluña. Abrió sus puertas en 1977, hace ya casi 50 años. Y con el tiempo, no solo ha mantenido su calidad, sino que ha mejorado su oferta hasta recibir este reconocimiento.
Así es la oferta del buffet libre
Con una vasta experiencia en el sector, el buffet d’Altafulla se ha ganado la reputación de ofrecer una experiencia gastronómica inigualable, combinando una extensa y variada selección de productos de temporada de la mejor calidad. La oferta culinaria incluye una impresionante variedad de platos fríos y calientes, adaptados a cada estación del año. Desde los tradicionales “calçots” en invierno hasta sabrosas paellas y fideuá en verano, cada visita ofrece una nueva oportunidad para disfrutar de lo mejor de la cocina mediterránea.
Los clientes pueden comenzar su experiencia con una de las ensaladas especiales del buffet, una selección de embutidos o un aperitivo. Luego, pueden elegir entre una variedad de platos principales que incluyen arroces, fideuá, diferentes tipos de pasta y una amplia gama de carnes y pescados, todos preparados con esmero. Y para cerrar la comida, una selección de postres caseros pone el broche de oro perfecto. El restaurante no es solo para los grandes comedores o indecisos. El local también ofrece la opción de comer a la carta. En esta, los amantes de las brasas encontrarán su lugar. Desde un pollo a la brasa hasta un entrecot, pasando por codornices, pescados y mariscos a la plancha, como calamares, merluza o una parrillada completa de carne o pescado. Y si uno llega a primera hora de la mañana, no hay problema, también se puede desayunar allí.
Qué es un Solete Repsol
Aunque los buffets asiáticos son los más reconocidos en la actualidad, otros han intentado destacar a su sombra. Existen buffets de cocina regional, de arroces, de tapas e incluso de pizza. En Cataluña, uno de estos lugares puede presumir de dos logros: ser el primero de toda la comunidad autónoma y el único con un Solete Repsol. ¿Pero qué es exactamente esta distinción?
A diferencia de los prestigiosos Soles Repsol, que se otorgan a restaurantes de alta cocina, los Soletes se centran en locales más accesibles y cotidianos, como bares, cafeterías, chiringuitos y gastrobares, que brindan experiencias culinarias excepcionales de manera más informal y asequible. Su nombramiento en esta lista ofrece un salto de calidad evidente para el restaurante. .
Cuánto cuesta el Buffet d’Altafulla
El Buffet d’Altafulla ofrece precios accesibles que permiten disfrutar de su excelente oferta gastronómica sin preocuparse por el presupuesto. Durante los días laborables, el precio es de 16,50 € por persona (bebida no incluida), y los niños hasta 8 años pueden disfrutar del buffet por 11,00 €. Durante los fines de semana y festivos, el precio es de 23,00 € por persona, con un precio reducido de 12,00 € para los niños. Estos precios, que incluyen el IVA, hacen del Buffet d’Altafulla una opción ideal tanto para una comida diaria como para celebraciones familiares o reuniones con amigos.
Cómo llegar
Llegar al buffet d’Altafulla desde Tarragona es sencillo y rápido. En coche, se toma la N-340 en dirección noreste hacia Altafulla. El trayecto es de aproximadamente 14 kilómetros y dura unos 15 minutos, dependiendo del tráfico. Siguiendo la N-340, se pasa por las localidades de La Móra y Tamarit antes de llegar a Altafulla. Una vez en la carretera nacional, en el kilómetro 1173, está el buffet. Alternativamente, el tren de Rodalies tarda 10 minutos hasta Altafulla, luego se ha de andar. Viajar desde Barcelona es algo más largo: por la AP-7 en dirección sur hacia Tarragona se toma la salida de Altafulla hasta la N-340. El trayecto es de aproximadamente 90 kilómetros y toma alrededor de una hora y 15 minutos. En transporte público, se va en un tren de Media Distancia o un Regional Exprés y se tarda una hora y media, más la caminata hasta el restaurante. Al llegar al buffet d’Altafulla, uno lo puede deducir. Solo el estacionamiento ocupa una superficie de 2.700 metros cuadrados, con plazas para automóviles, camiones y autobuses. Además, cuenta con instalaciones para transportistas, como duchas y servicios de lavandería.