De entre todos los recuerdos estivales próximos al mar, de celebraciones y reuniones familiares o con amigos, de mesas largas, alegres y ruidosas, tengo una memoria preferida, asociada al estreno del verano. Porque el pistoletazo de salida de la mejor época del año para vivir al pie del Cantábrico lo marca la cena de San Juan, en la que el menú consiste en un desfile de bandejas cargadas de sardinas asadas, brillantes y tersas, que comemos con las manos, y ruedas de bonito a la brasa o encebolladas, acompañadas de ensalada de tomate, lechuga y cebolleta fresca.
Producto, buen control de la técnica para asar estas joyas y un mantel de papel sobre el que disfrutar de todo ello. Aquí van cinco asadores de Santander y alrededores en los que celebrar que el verano ya está aquí. Eso sí, recuerda que también es temporada alta en el norte, por lo que si quieres asegurar tu mesa en cualquiera de estos restaurantes, siempre es mejor reservar.
Barrio Pesquero
El Poblado Pesquero de Sotileza de Santander, conocido popularmente como Barrio Pesquero, comenzó a tomar forma a mediados del siglo XX, al trasladarse las viviendas de los pescadores desde la zona urbana próxima a Puertochico. Con un breve paseo desde el centro de la ciudad, recorriendo el frente marítimo, se puede descubrir este barrio de construcciones bajas con patios interiores que esconden, en sus entrañas, algunos de los restaurantes especializados en pescado y marisco con mejor calidad-precio de la capital cántabra.
Si de parrilladas de sardinas se trata, el restaurante marisquería Casa Jose es el lugar indicado. Un negocio familiar con una carta repleta de buenas opciones para acompañar las sardinas, protagonistas de sus brasas. También son referencia en platos como el arroz con bogavante o las mariscadas. Completarían mi comanda de verano los mejillones en salsa, los maganos de guadañeta y una ensalada. // Casa Jose. Plaza de Cabildos, 1.
Monte
Monte está situada en la cara norte del municipio de Santander, es decir, damos un giro de 180 grados sobre la habitual vista de la bahía y observamos en dirección contraria, al otro lado de la ciudad. Puedes subir paseando en dirección al faro de Cabo Mayor, pasando por Mataleñas y desviándote después, aunque también hay opciones para llegar en autobús y, por supuesto, en coche.
Próximos entre sí, están el asador El Pozo y el restaurante Conde Luna, dos opciones estupendas para una comida o cena de verano que tenga como protagonistas las sardinas a la brasa, que, en ambos casos, pueden complementarse con otras opciones de raciones y picoteo. En el primero, es también remarcable su buena mano con el bonito del Cantábrico, que ofrecen asado, y con los bocartes fritos o rebozados, otra de las delicias veraniegas por excelencia. Si te apetece disfrutar de la sardinada al aire libre, el Conde Luna tiene terraza. // Asador El Pozo. Inés Diego del Noval, 60 / Restaurante Conde Luna. Inés Diego del Noval, 11.
Pedreña
Pedreña se encuentra, bahía de por medio, frente a frente con Santander. Famosa por su campo de golf, consagrado por el cántabro Severiano Ballesteros, también es uno de los lugares de peregrinación para quienes saben comer buenos pescados a la brasa. Mis preferidos: La Trainera, un restaurante que también sirve buenos arroces y mariscos, y que tiene una muy buena terraza para comer o cenar en verano; y el asador El Tronky que, en mi opinión, es el mejor de la zona y uno mis lugares favoritos en las proximidades de la bahía.
Puedes llegar hasta Pedreña en coche, pero si tu origen es la ciudad de Santander, también es posible hacerlo en barco, comprando un ticket para la lancha de los Reginas. Estas características barcazas de panza roja que cruzan la bahía constantemente son un clásico de la ciudad y una opción más que recomendable para observarla desde el mar. Tanto si eres de aquí como si estás de paso, esta es una vista imperdible. // La Trainera. Av. Severiano Ballesteros, 134. / Asador El Tronky. Barrio El Muelle S/N, frente a los embarcaderos. //
