Los precios en bares y restaurantes han subido un 7,3% en abril de este año respecto al mismo mes de 2022 y un 0,6% en comparación con el pasado marzo, lo que mantiene su tendencia alcista e incrementa su diferencia con el Índice de Precios de Consumo (IPC) que se quedó en un 4,1%.
Por su parte, los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas se elevaron el 12,9% en tasa anual. El punto de inflexión se produjo en noviembre del año pasado, momento en el que el incremento de los precios en los bares y restaurantes superó al IPC general, y desde entonces la diferencia ha ido en aumento.
Por comunidades autónomas, Canarias (+9,4%), Andalucía (+8,5%), Castila-La Mancha(+8,3%) y las Islas Baleares (+8,3%) son los territorios donde más han subido.
También han crecido por encima de la media general los precios de la hostelería en la Comunidad Valenciana (+7,9%) y en La Rioja (+7,8%).
Castilla y León y Cantabria, por debajo de la media
El resto de comunidades autónomas se han situado por debajo, aunque Extremadura (+7,3%), Castilla y León (+7,2%) y Cantabria (+7,1%) prácticamente igualan la variación interanual general del 7,3%.
El pan, el pescado y la carne son tres productos básicos que han conseguido contener la inflación alimentaria en lo que va de año, aunque sus comerciantes minoristas se quejan de la caída del consumo y la subida de los costes.
A diferencia de la carne y el pescado, el pan sí está incluido en el grupo de alimentos a los que se eliminó o redujo el IVA desde enero con la intención de hacer frente a la subida de los precios de la alimentación, que en abril fue del 12,9% anual frente a la tasa general del 4,1%.
El precio del pan no varió respecto a marzo y apenas creció el 1% entre enero y abril respecto al mismo periodo de 2022, mientras que si se compara con abril del año pasado el aumento fue del 18,2%.